El tema que la semana pasada ocupó espacio
significativo en las secciones citadinas de los medios de comunicación fue la
promulgación de la Ley de Movilidad Urbana por parte del Jefe de Gobierno de la
Ciudad de México.
En lo general, la mayoría señaló como puntos
fundamentales de esta legislación: el peatón es primero, restricciones a
vehículos de carga, seguros de daños contra terceros, exámenes teórico-práctico
y médico para obtener licencia de conducir, la desaparición de las concesiones
de transporte público, la creación de un órgano regulador y la construcción de
ciclovías y bici-estacionamientos.Desde luego falta el complemento a la Ley: reglamentos, programas, decretos de creación y lineamientos para generar movilidad en la ciudad de México, considerando, según establece la propia Ley, que se maximicen los desplazamientos ágiles con los mínimos efectos negativos sobre la calidad de vida y el medio ambiente y el uso adecuado y eficiente de la vía pública.
Independientemente de que la difusión y generación de conciencia sobre la Ley y sus reglamentos significa un reto, me parece que el tema de la movilidad no tendrá grandes avances en materia de cuidado de la calidad de vida y el medio ambiente, si se pierden de vista algunos datos.
Según
el Diccionario de la Real Academia Española de la Lengua, movilidad es “cualidad de movible” y ésta la define
como “Que por sí puede moverse, o es
capaz de recibir movimiento por ajeno impulso”. En otras palabras, la movilidad
es la capacidad para moverse, es decir,
desplazarse, trasladarse. Cualquier obstrucción, obstáculo o eventualidad que impidan la movilidad
de forma fluida, generará afectaciones en la calidad de vida y en el medio
ambiente, impidiendo el cumplimiento a esta ley.
¿Qué
circunstancias pueden interferir?
TOPES
Según el Doctor René Drucker titular de la
Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación del Gobierno del DF, en la zona
metropolitana circulan más de 4 millones de automotores y “en alguna
ocasión hace unos cuantos años escuché a un funcionario decir que había
alrededor de 30 mil topes (seguro que ahora hay aún más) –Febrero 21 de 2012”.Los topes afectan las suspensiones, especialmente cuando no están pintados o la señalización respectiva está justo en donde está el tope, pero también frenan a los autos, contribuyendo a la contaminación. El doctor Arón Jazcilevich, investigador del Centro de Ciencias de la Atmósfera de la UNAM, explica que “cuando un auto arranca desde una velocidad cero, se incurre en un pico de emisiones (de CO2); pero cuando reanuda la marcha después de un tope, las emisiones se elevan entre cinco y ocho veces más en microgramos por segundo. En otras palabras, cada vez que arrancamos a partir de un tope, un vehículo emite de 50 a 80 microgramos de CO2 cada 10 segundos.
Los topes hacen perder tiempo, incrementan el consumo de combustible, provocan desgaste y desperfectos, afectan la movilidad y sólo son una medida restrictiva que no promueve la educación, ni vial, ni cívica.
BACHES
Según la Secretaría de Obras y Servicios del
Gobierno del DF, durante la segunda semana de marzo de este año atendió 5 mil 299 baches (47, 500 metros cuadrados de vías primarias y
secundarias de la capital).
Se estima que en promedio en la ciudad de México se
producen más de 60 mil hoyos por año solo en vías primarias y secundarias, sin
considerar los de las miles de calles que no considera la autoridad como
primarias o secundarias, que son la mayoría de las calles. No obstante Alberto
Hernández, gerente de operaciones de una empresa proveedora de asfalto comentó:
“la cifra de 5 mil baches por mes que dio la Secretaría de Obras y Servicios se
queda corta ya que el 80% de toda la carpeta asfáltica en la ciudad de México
tiene fallas por la mala calidad del producto que se utiliza. Bajita la mano
estarías hablando de mucho más de 100 mil baches por año…”
Al igual que los topes, los baches incrementan la
contaminación, con el agravante de que los vehículos pueden quedar
descompuestos entorpeciendo la movilidad e incrementando la contaminación.
MICROBUSES
El doctor Héctor Riveros Rotgé, investigador del Instituto de Física de la UNAM y miembro de la Academia Mexicana de Ciencias, asegura en 2006 la Secretaría del Medio Ambiente del Distrito Federal publicó un estudio, coordinado por él, que muestra que el transporte público de pasajeros es el más contaminante del parque vehicular, incluso señala: “Esta situación es preocupante toda vez que no sólo son unidades con mayor tasa de emisión (de monóxido de carbono, hidrocarburos y óxidos de nitrógeno), sino que son automotores con recorridos entre cuatro y cinco veces mayores que las unidades particulares”. Contaminantes per se y obstruyendo las vialidades, afectan la calidad del aire y la calidad de vida del ciudadano.
ESQUINA, BAJAN
Las paradas del transporte público en las esquinas es otro factor que
interferirá en el cumplimiento de la nueva Ley. Los autos que pretenden virar a
la derecha tienen que frenar y esperar a que el transporte público avance, o
bien intentar abrirse a la izquierda para rebasar, generando obstrucción a la
vialidad y con ello, incremento en la contaminación, tanto de su vehículo como
de todos los demás que tienen que detenerse. La situación es peor cuando, una
vez que se abre para rebasar, el transporte público comienza a avanzar.He estado en ciudades en donde el transporte público tiene paradas obligatorias a mitad de la cuadra para permitir el flujo vehicular que quiere girar hacia la derecha. Ello conlleva además el beneficio para el usuario del transporte, de tener que caminar (hacer un poco de ejercicio) para llegar a la parada obligatoria.
La nueva Ley señala entre las atribuciones del Jefe de Gobierno: “Fomentar en la sociedad, las condiciones generales para la
implementación y desarrollo sistematizado de la cultura de la movilidad”, y
que la nueva Secretaria de Movilidad “promoverá
en la población la adopción de nuevos hábitos de movilidad encaminados a
mejorar las condiciones en que se realizan los desplazamientos…”.
El
reto lo pueden compartir las autoridades con agencias de relaciones públicas,
de mercadotecnia y de publicidad para desarrollar campañas creativas que puedan
contribuir a mejorar la movilidad y la calidad de vida de los habitantes de la
ciudad de México.
No hay comentarios:
Publicar un comentario